Cualidades De Un Mentor
Habrá gente que se pregunte para qué sirve tener un mentor y qué puede esperar de él. En muchas ocasiones, buscamos mentores con amplia experiencia en el plano o ámbito que nos interese, para aprender de sus consejos, permitiéndonos acelerar nuestro desarrollo. Sin embargo, hay otros muchos aspectos a tener en cuenta en nuestro propósito de encontrar un mentor.
No basta con tener experiencia para ser un buen mentor, si no que requiere una serie de cualidades que te contaremos a continuación.
Es un hecho que eres capaz, que lo creas es tu elección.
Anibal Pérez
Interés
Para alcanzar el objetivo, un mentor debe estar interesado en el tema que va a exponer, y en los objetivo y proyectos que va a realizar la mentorización. Su objetivo es que los proyectos crezcan, promoviendo el conocimiento, y crecimiento, no sólo de la propuesta de valor o el modelo de negocio, si no de los miembros fundadores o equipo directivo.
Una Visión Estratégica
Un mentor con mayor experiencia puede aportar otro punto de vista, y debe ser capaz de cuestionar crítica y objetivamente el plan de acción de la empresa. Sus experiencias hacen que puedan ver aspectos críticos que puedan presentar riesgos altos en base a su experiencia. El objetivo es acelerar el aprendizaje.
Una Conducta Pasiva
Un buen mentor debe escuchar más que hablar, y actuar en un segundo plano, permitiendo que los mentorizados desarrollen su propio tren de pensamientos y análisis. La misión del mentor es abrir vías no exploradas, no debe convertirse en el protagonista.
Empatía
Un mentor debe ser capaz de captar cuál es la situación de cada una de las empresas y saber cómo escucharlas, ponerse en su situación y transmitir sus conocimientos de la manera más simple posible.
Orienta
Lo más fácil es que como mentor se tienda a resolver las situaciones que se le planteen en base a la experiencia propia, sin embargo, lo que diferencia a un buen mentor es aquel que guía a sus clientes a tomar la mejor decisión por su cuenta. El reto del mentor es llevar a su cliente a encontrar la forma de hallar el camino adecuado. Es decir, asesora desde su entender sin esperar que el otro siga sus mismos pasos y dejando espacio para que el encuentre su alternativa más apropiada.
Reta
El desafío es clave en un proceso de mentorización. El buen mentor reta e invita a la reflexión, promoviendo pasar a la acción y ofreciendo confianza para ir por los objetivos que el cliente se haya marcado. Cualquier proceso de mentorización, sea formal o informal, se asienta sobre la relación de confianza entre iguales basada en el valor mutuo que dicha relación aporta.
